La joven empresaria, que está esperando su primer hijo junto a Jared Kushner, sigue cumpliendo con sus compromisos profesionales, a la vez que se ha mostrado completamente feliz con el desarrollo natural de este evento, que fue anunciado en Twitter hace algunos meses.

De esta manera, Trump ha mostrado su nueva colección de zapatos en varias ciudades de Estados Unidos, sin haber mostrado síntomas de cansancio a pesar de su apretada agenda, y de mantener una panza de embarazada que aumenta notoriamente, aunque dentro de los carriles normales.

Incluso, el mes pasado se la pudo ver en un centro comercial de Topanga, en California, y el jueves de la pasada semana en los almacenes Macy’s de Nueva York. Luego, esta semana, se desplazó hasta la ciudad de McLean, en el estado de Virginia, para presentar sus nuevas creaciones, con el espaldarazo que significa el ser la hija de Donald Trump.

Vestida completamente de negro, para poder realzar de cualquier manera su espectacular figura, y siempre sonriente, Ivanka se mostró por demás cariñosa con muchos de los pequeños hijos de algunas de sus amigas que se acercaron al evento, por lo que su instinto maternal parece estar ya latente.